LAS HORAS
y ese constante fluir de horas vacías
produce un cansancio
pesado como el hierro
extenuada por la monotonía abro la ventana
para mirar la calle
me invade el viento
un aroma de retamas
avanza sobre los viejos muebles
y hostiga los rincones de mi mente
engarzada en la moldura de un cuadro
una telaraña improvisa coreografías
hasta que el viento la fracciona y cae
nuevamente miro por la ventana
en un frágil juego de espejos arquetípicos
el cielo nublado
como un halcón peregrino
de alas gigantescas
refleja
ese constante fluir de horas desiertas
siento sabor de lejanía
en las papilas gustativas
y en los labios
Isabel Furini es poeta premiada.
Imagem criada por Lucy Urquiza.